A las faldas del Chimborazo con Baltazar Ushca

 

El frío ya no cala en sus huesos, son 53 años que Baltazar Ushca, conocido como “Taita Baltazar” trabaja extrayendo el hielo del magnánimo Chimborazo. Todos los jueves y viernes se levanta a las seis de la mañana para alistar las cuatro herramientas esenciales de su trabajo, el pico le sirve para desbastar el hielo, la lampa para remover, la barra para alzar y el hacha para formar bloques de aproximadamente cuarenta centímetros de largo.

“Que no pase nada, que Taita Diosito me ayude. ¡Taita Chimbo (Chimborazo) de permiso para sacar hielo y perdonará solo vengo a trabajar!”, son los rezos que dice Baltazar cuando sale de la mina de hielo para que pueda regresar con permiso del volcán evitando que sucedan accidentes.Hombre de baja estatura, tez morena, cabello negro y ojos cafés que siempre están vigilantes a lo que ocurre a su alrededor. Viste pantalones de tela, ponchos tejidos, botas de caucho y un sombrero negro desgastado que simulan su edad de 68 años. Sin embargo, las arrugas en su rostro reflejan la sonrisa que “Taita Baltazar” muestra con todos sus familiares y amigos; ese carisma que ha hecho que su legado continúe vigente en el trajinar de los mercados de esta provincia.

Cada bloque de hielo que extrae del Chimborazo pesa 20 kilos y para evitar que se deslían agita su paso entre el manto paramal para buscar paja y torcerla con gran habilidad hasta formar sogas que puedan cubrir el hielo. Enseguida, llama a sus tres asnos con una sonrisa que refleja su entusiasmo. “¡Gabriela, Patricia, Luis Guamán!, necesito que vengan a cargar”, es lo que dice Baltazar una vez que ha alistado el producto en las faldas de la colosal montaña.

Cada uno de sus burros cargan dos hielos, por ende entre esos dos días Baltazar logra formar doce bloques poniendo en riesgo su vida en las pendientes del volcán, por ello para evitar el enojo de este imponente coloso, Baltazar agradece su generosidad por haberle permitido excavar para que él tenga un sustento económico.

Por: Carla León. | Leer más...